Helados

Gracias a las insondables triquiñuelas informáticas, durante estos días podemos ver a nuestra eximia Paz Vega desplegada en dos, cortejándose, e incluso haciéndose el amor a si misma mientras esperamos el autobus. (Aquí podeis ver fotos y comentarios http://elreplicante.blogspot.com/)
Las fotos, de una campaña de helados, tienen una tersa epidermis de cuadro renacentista y una bomba semántica en las tripas.

Los bienpensantes de pro, inmunes a la belleza de dichas fotos, se rasgan las vestiduras. Su carácter lésbico les exalta, azora e inquieta. Mientras, otros y otras están a punto de enarbolarlas en bandera precisamente por eso.
Pero lo que me parece más chocante (bueno, no me choca, soy creata publicitaria) es que a nadie le haya llamado la atención que se nos venda que, chupando un helado, podamos entrar en contacto con todos nuestros” yos” sin pasar por el psicólogo.
Gracias a este producto lácteo, nuestra morenaza consigue ponerse en contacto directo con sus múltiples personalidades. Y nosotros también si lo compramos, aunque sea de oferta.

Clonada, la bella se exhibe en el spot cual Ama ataviada por un clon perverso de Christian Dior, mientras busca, mirando al frente, un esclavo goloso. Y recalca : "Mi yo estricto”. "Mi yo sugerente”, dice ahora disfrazada de alguna otra cosa más pret a porter. “Mi yo misterioso”, nos espeta con suave seseo andaluz.

¡La disfrutamos también caminando vestida de mariantonieta minifaldera con su propia cabeza bajo el brazo.!

!Ay si Freud, levantara la cabeza!, porque es en ese momento cumbre cuando nos confiesa haber conectado, nada mas ni nada menos, que con su “SUPERYO”, ese estadio de la psique que los psicólogos que frecuentan este, nuestro blog okupa, os explicarán mejor que yo lo que es, pero que paradójicamente, es una partecita jodida que nos pone reglas y restricciones .

Queridos amigos, y recien llegados, psicólogos o pacientes, pronunciaros, expresaros.